Albóndigas con cebolla y vino blanco

Albóndigas con cebolla y vino blanco

Las albóndigas con cebolla y vino blanco son un plato delicioso y sustancioso que combina a la perfección la carne de las albóndigas con los sabores de la cebolla y el vino blanco. Es un plato versátil que se puede servir como plato principal o como acompañamiento de otros platos. Aquí te mostraremos una receta sencilla para prepararlo.

Ingredientes:

• 500 gramos de carne picada
• 1 cebolla grande
• 2 dientes de ajo
• 1 huevo
• 1 rebanada de pan remojada en leche
• Perejil fresco
• 200 ml de vino blanco
• Sal y pimienta al gusto
• Harina para enharinar
• Aceite de oliva para freír

Preparación:

1. En un recipiente, mezcla la carne picada con el huevo batido, los ajos picados finamente, el perejil picado, sal y pimienta al gusto. Añade la rebanada de pan remojada en leche y mezcla bien hasta obtener una masa homogénea.
2. Forma las albóndigas del tamaño que desees. Puedes hacerlas pequeñas para servirlas como aperitivo o más grandes para un plato principal.
3. Enharina las albóndigas ligeramente para darles un poco de textura crujiente al cocinarlas.
4. En una sartén grande, añade aceite de oliva y caliéntalo a fuego medio-alto.
5. Añade las albóndigas a la sartén y fríelas hasta que estén doradas por todos los lados. Retira las albóndigas de la sartén y reserva.
6. En la misma sartén, añade la cebolla previamente cortada en juliana y sofríela hasta que esté dorada y blandita.
7. Vuelve a colocar las albóndigas en la sartén junto con la cebolla y vierte el vino blanco.
8. Deja que todo se cocine a fuego lento durante unos 15 minutos, hasta que las albóndigas estén bien cocidas y la salsa haya reducido un poco.
9. Sirve las albóndigas con una cama de cebolla y salsa. Puedes acompañarlas con patatas fritas, arroz o una ensalada fresca.

¡Y eso es todo! Ahora puedes disfrutar de unas deliciosas albóndigas con cebolla y vino blanco que seguramente te encantarán. Este plato es perfecto para compartir en familia o para sorprender a tus invitados en una comida especial. ¡Buen provecho!