Hacer yogur sin lactosa

¿Por qué hacer yogur sin lactosa?

El yogur es una alimento muy saludable y nutritivo, pero para aquellas personas que son intolerantes o alérgicas a la lactosa, su consumo puede resultar en problemas digestivos.

Por suerte, es posible hacer yogur sin lactosa en casa con facilidad. Además, hacerlo en casa significa que puedes controlar los ingredientes que utilizas y asegurarte de que estén libres de cualquier aditivo o conservante innecesario.

Ingredientes necesarios

• 1 litro de leche sin lactosa
• 1/2 taza de yogur sin lactosa previamente hecho o en su defecto, 1 sobre de fermento especial para yogures sin lactosa
• Edulcorante al gusto (opcional)

Pasos para hacer yogur sin lactosa

Paso 1: Calentar la leche

Vierte el litro de leche sin lactosa en una olla y caliéntala a fuego medio hasta que alcance los 90°C. Remueve la leche continuamente para evitar que se queme o forme una costra en la superficie.

Paso 2: Dejar enfriar la leche

Una vez que la leche haya alcanzado los 90°C, retírala del fuego y déjala enfriar hasta que su temperatura baje a los 40°C. Para acelerar este proceso, puedes colocar la olla en un recipiente con agua helada.

Paso 3: Mezclar el fermento con la leche

En un recipiente aparte, mezcla la 1/2 taza de yogur sin lactosa o el fermento especial para yogures sin lactosa con un poco de la leche caliente. Remueve bien para asegurarte de que el fermento se disuelva completamente.

Añade la mezcla de fermento y leche al resto de la leche y remueve bien para que se integren todos los ingredientes.

Paso 4: Incubar la mezcla

Vierte la mezcla en un tarro de cristal con tapa y colócalo en una incubadora de yogur o en un lugar cálido y oscuro (como un horno apagado con la luz encendida). Déjalo reposar durante al menos 8 horas, o hasta que veas que el yogur ha adquirido la consistencia deseada.

Paso 5: Enfriar y servir

Una vez que el yogur haya terminado de fermentar, déjalo enfriar en la nevera durante al menos una hora antes de servir. Puedes endulzarlo con edulcorante al gusto, si lo deseas.

Conclusiones

Ahora que has aprendido a hacer yogur sin lactosa en casa, ya no tienes que preocuparte por los problemas digestivos que la lactosa te puede causar. Además, al hacerlo en casa, sabes que estás consumiendo un producto fresco y natural que no contiene aditivos ni conservantes innecesarios. ¡Disfruta de tu yogur sin lactosa casero!

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